Ante la pregunta cáustica y sobrecogedora ¿Como puedo ser una bruja Wicca? Nos hemos entrevistado con una hechicera del parque Lezama (entrevista que sorpresivamente se desarrolló en el cementerio británico); quien nos iluminó sobre estas cuestiones, explicándonos de qué se trata esta religión, y como podemos convertirnos en una bruja Wicca (conversión plausible sólo para las damas).
La Wicca es una quimera de creencias paganas, atravesada por una visión moderna de los antiguos cultos. Apenas Inglaterra abolió las leyes contra la brujería, en una fecha tan increíble como 1954; el ocultista Gerald Gardner publicó su célebre Witchcraft Today (La brujería hoy, para nosotros, ayer) y luego la obra que instalaría definitivamente la religión wicca en el centro del debate: The Meaning of Witchcraft (El significado de la brujería). Las mentes abúlicas y racionalistas -arremete nuestra hechicera- aseguraron que Gardner era un impostor; basándose que no hay un sólo ritual en su libro que no haya sido rigurosamente robado de la Golden Down. Algunos seguidores de Gerald Gardner argumentaron que el maestro debió rellenar varios puntos oscuros de la tradición wicca, aunque jamás aclararon cuáles.
En este punto, la hechicera y quien les escribe, nos trenzamos en un debate largo y tedioso. La ocultista vociferaba que Gardner utilizó la palabra wica (con una sola C) como adjetivo, es decir, para denominar a los practicantes de brujería. Pero la erudición áspera y modesta que me acompaña respondió que la palabra wicca ya existía en el inglés antiguo. Se pronunciaba Vuicha, y significa Brujo. De hecho -continué, afiebrado y alarmado por su prosaico desconocimiento del anglosajón- la palabra witch, bruja, proviene de aquel wicca; y más atrás del protogermánico Wicken (hechicero), el islandés Vitki (mago), el gótico Wikkon (sagrado) y Weik (Doblar, torcer, en alusión al baile chúcaro de los magos góticos); pero lo maravilloso de esta etimología -proseguí, con mi bruja wicca bostezando- es que todas estas palabras provienen de la raíz indoeuropea Wise, Sabio. De este modo, bruja significa originalmente Sabia, la que sabe; y brujería, Witchcraft; el arte de los que saben.
Concluida mi exposición, observé que la hechicera huía precipitadamente del cementerio. Fuentes confiables me han informado que fue vista sobrevolando la calle Montes de Oca, vistiendo un camisón rojo y distribuyendo maldiciones a todos los que osaran analizar algo tan sagrado como la religión Wicca.
Incrédulos y temerarios, les dejamos algunos interesantes libros de brujería; especialmente dedicados a las hermosas Wicca.
Pueden descargar estos libros sobre la religión Wicca aquí:
La Wicca es una quimera de creencias paganas, atravesada por una visión moderna de los antiguos cultos. Apenas Inglaterra abolió las leyes contra la brujería, en una fecha tan increíble como 1954; el ocultista Gerald Gardner publicó su célebre Witchcraft Today (La brujería hoy, para nosotros, ayer) y luego la obra que instalaría definitivamente la religión wicca en el centro del debate: The Meaning of Witchcraft (El significado de la brujería). Las mentes abúlicas y racionalistas -arremete nuestra hechicera- aseguraron que Gardner era un impostor; basándose que no hay un sólo ritual en su libro que no haya sido rigurosamente robado de la Golden Down. Algunos seguidores de Gerald Gardner argumentaron que el maestro debió rellenar varios puntos oscuros de la tradición wicca, aunque jamás aclararon cuáles.
En este punto, la hechicera y quien les escribe, nos trenzamos en un debate largo y tedioso. La ocultista vociferaba que Gardner utilizó la palabra wica (con una sola C) como adjetivo, es decir, para denominar a los practicantes de brujería. Pero la erudición áspera y modesta que me acompaña respondió que la palabra wicca ya existía en el inglés antiguo. Se pronunciaba Vuicha, y significa Brujo. De hecho -continué, afiebrado y alarmado por su prosaico desconocimiento del anglosajón- la palabra witch, bruja, proviene de aquel wicca; y más atrás del protogermánico Wicken (hechicero), el islandés Vitki (mago), el gótico Wikkon (sagrado) y Weik (Doblar, torcer, en alusión al baile chúcaro de los magos góticos); pero lo maravilloso de esta etimología -proseguí, con mi bruja wicca bostezando- es que todas estas palabras provienen de la raíz indoeuropea Wise, Sabio. De este modo, bruja significa originalmente Sabia, la que sabe; y brujería, Witchcraft; el arte de los que saben.
Concluida mi exposición, observé que la hechicera huía precipitadamente del cementerio. Fuentes confiables me han informado que fue vista sobrevolando la calle Montes de Oca, vistiendo un camisón rojo y distribuyendo maldiciones a todos los que osaran analizar algo tan sagrado como la religión Wicca.
Incrédulos y temerarios, les dejamos algunos interesantes libros de brujería; especialmente dedicados a las hermosas Wicca.
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